
Nuevo trabajo, el sexto ya, para los chicos asturianos de Sound Of Silence: Rubo Martínez y David Fernández (guitarras), Nefta Vázquez (voz), Javi Lorenzo (bajo) y Jorge Rodríguez (batería). “Primvs Capite”, que se espera sea el primero de una tetralogía, fue grabado, mezclado y masterizado por el propio Nefta en sus Breakdown Studios de Gijón. Cuenta además con arte de Godless Design y las colaboraciones de Dmitri Staligrado y Gin Barbería (Absalem).
“Amanece La Esperanza” es el arranque del nuevo trabajo, que lo es también de la propia tetralogía. Un arranque cercano al post-rock más atmosférico, en cierto modo luminoso y con un punto llamativo. Una pequeña brisa antes de que la tormenta se desate. Está resuelta para dar la bienvenida a una “Tensa calma” y sobremanera amplificar el impacto de ésta. Grandes dosis de melodía en guitarras y una base rítmica centelleante allanan el camino para que Nefta acomode su habitual registro chillón. Todo en beneficio de un segundo corte construido con mucho cuidado y atención al detalle, trufado de inteligentes cambios rítmicos y ejecutado con la buena factura habitual del combo asturiano. Ganadora dupla inicial.
“Océano De Traición”, con la colaboración de Dmitri Staligrado y que fuera el encargado de presentar en sociedad este “Primvs Capite”, precipita una hibridación con esos entornos cada vez más cercanos al black con los que la banda venía amenazando desde su anterior álbum de estudio. Aquél ya lejano “El Llanto De Los Mártires” de 2017. Jorge Rodríguez teje una tupida línea de batería. Intensa, tan vitriólica como el propio tema al que apoya, intercalando blast beats con ritmos más apaciguados con total naturalidad. Lo que no faltan son los habituales breakdowns sin los que esta banda no sería la que es. El que irrumpe en este tercer corte, tan preciso como demoledor, anticipa el solo de Dmitri Staligrado y da la razón a quienes pensaron que ésta sería una gran carta de presentación para “Primvs Capite”. El largo epílogo, y la forma en que se conjugan velocidad y atmósfera, no podría estar mejor resuelto. Un corte que, además, resulta todo un cañón en directo. Damos fe.
“Caminantes Al Borde Del Deshielo” recupera de manera tímida aquella calma del corte inicial para después apostarse en las orillas de un black entre melódico y atmosférico donde resuenan ecos de bandas como Austere o Woods Of Desolation. Nombres que, a priori, uno no asociaría a una banda como esta. Vuelve a ser éste un corte que amplifica una pulsión algo más dramática, de black descerrajado y directo, bajo un sonido y una producción espectaculares. Exponencial el crecimiento de los Breakdown Studios desde los albores del confinamiento hasta nuestros días. Llama la atención aquí la destensada calma de un puente central que, en su reposo, resultará casi onírico. Un oasis entre la habitual angustia del quinteto con base en Gijón.
La dupla final “Densa Niebla + Vacío Infinito” irrumpe con las guitarras más ennegrecidas de todo “Primvs Capite”. Que lejos de separarse de esa cercanía al black atmosférico más veloz, lo acentúa con base en unas melodías difícilmente desechables. Nefta chilla y se retuerce como si en el empeño le fuera la vida. Si acaso, dando una mayor cabida a registros más oscurecidos. “Amanece La esperanza” al margen, corte más perimetral y exógeno del disco, acomete un aspecto lírico obligadamente oscuro, con la siempre particular forma de trazar letras del combo astur. El largo cierre, tenue y reposado, dibujará una calma que de forma invariable conduce hacia la nada.
“Oh densa niebla que destruye nuestra tierra”.
De momento creo que se les puede perdonar lo poco menos de treinta minutos que alcanza este nuevo trabajo de los asturianos, siendo como es el primer paso de otros tres que restan por venir. Un trabajo valiente en ciertos aspectos, que muestra a una banda aún inquieta a la hora de sentarse a componer, decididos a no encasillarse y que siguen a la caza de su propio espacio con una propuesta, tanto musical como lírica, cada vez más personal. Atraviesan “Primvs Capite” grandes dosis de intensidad, un aspecto lírico de lo más llamativo y el buen nivel técnico del que siempre han hecho gala. Ahora queda el deseo, por nuestra parte, de que su particular tetralogía llegue a buen término. Y también el de contároslo aquí, en Heavy Metal Brigade.
Texto: David Naves